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Cuando Edward Cullen y Bella Swan se conocieron en Crepúsculo, nació una historia de amor icónica. Pero hasta ahora, sus fans solo conocen la historia a través de Bella. Por fin los lectores podrán vivir la versión de Edward en la muy esperada novela Sol de medianoche.
La inolvidable historia, contada a través de los ojos de Edward, toma un cariz nuevo y definitivamente oscuro. Conocer a Bella es lo más perturbador e intrigante que le ha sucedido en todos sus años como vampiro. A medida que se nos desvelan detalles fascinantes del pasado de Edward y la complejidad de sus pensamientos más íntimos, entenderemos por qué este es el conflicto interno que define su vida. ¿Cómo puede justificar los impulsos de su corazón si significan poner a Bella en peligro?
En Sol de Medianoche, Stephenie Meyer nos transporta de nuevo a un mundo que ha cautivado a millones de lectores y nos trae una novela épica sobre los profundos placeres y las consecuencias devastadoras de un amor inmortal.
Tengo opiniones contradictorias con este libro. En general me molesta bastante dejar los capítulos a medias pero es que los capítulos de este libro son suuuuper largos, cosa que me irritaba un poco. Pero por otro lado... me ha encantado poder revivir Crepúsculo desde el punto de vista de Edward. La verdad es que había bastantes cosas que no recordaba y que al leer esté libro me han entrado muchísimas ganas de releer el otro (vale, es verdad, lo he acabado releyendo, alternando un capítulo de cada uno de ellos y me ha sorprendido bastante).
Tengo la sensación, después de haber hecho esta lectura tan... rara, de que la autora ha intentado mantener los mimos capítulos que en Crepúsculo. Es decir, por lo que he podido ver, la mayoría de los capítulos se llaman igual y, más o menos, suceden las mismas cosas. Sin embargo, Crepúsculo es bastante más corto porque los capítulos duran la mitad (aprox.) y eso es porque Edward se pasa mucho tiempo dándole vueltas a lo mismo (aunque en realidad todo suceda en apenas unos segundos). Sí, me han hecho gracia algunos comentarios sobre la cordura de Bella por no salir corriendo y eso, pero Edward tampoco está mucho mejor.
Quitando las partes obvias de acoso (verla dormir, colarse en su habitación, espiarla...), sobre las que también piensa bastante (aunque las descarta rápido con "excusas" un tanto cutres *ejem*, *ejem* el meteorito...), Edward es un poco paranoico, por decirlo sutilmente. Se pasa páginas y páginas temiendo que Bella salga corriendo de él, páginas y páginas pensando que está mal de la cabeza por no hacerlo y páginas y páginas rallándose sobre lo que puede/debe o no decirle (aunque luego se lo cuenta todo igual). Y en medio de todo eso hay recuerdos y momentos con su familia que me han hecho entender mejor a los Cullen y que, para que engañarnos, me han encantado (conocer a los Cullen más a fondo es lo que más he disfrutado, Emmet y Alice son geniales💙🥰).
Dicho esto, y aunque parezca que me estoy quejando mucho, la realidad es que el único momento que se me ha hecho pesado ha sido el del partido de beisbol. Si bien los pensamientos de Edward eran un poco repetitivos (al final), no se me ha hecho nada lento y me ha tenido enganchada todo el rato (pese a que ya conocía la historia). En realidad, si no fuese porque me he marcado un ritmo de lectura para "adaptarme" a la Lectura Conjunta de #ClaizaCullen, me hubiese acabado el libro en dos-tres días. Lo único que no me ha gustado ha sido la extensión de los capítulos y, por ahora, la actitud de Rosalie porque me ha parecido un poco de niña pequeña mimada. Estoy deseando ver si se escriben el resto de los libros desde esta perspectiva porque...😍.
VALORACIÓN: ⭐⭐⭐⭐
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