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Ha pasado un año desde que Emil fue coronado como el rey de la nación del sol. A pesar de que no ha logrado olvidar los terribles sucesos ocurridos en la Isla de las Sombras, ha intentado ser el líder que Alariel necesita en tiempos oscuros.
Emil y el resto de la corte están preocupados por el extraño comportamiento del Sol, que no ha salido a la hora habitual y con frecuencia aparece más tarde, señal de un peligro inminente. Es muy probable que los antiguos rencores del reino de la Luna tengan algo que ver con el desconcierto y el temor que se han propagado en Alariel.
Ha llegado el momento de buscar respuestas no sólo para salvar a la nación del sol, sino también para sanar viejas heridas. Gianna hará todo lo posible por estar a la altura de su nuevo cargo. Ezra y Bastian viajarán a Ilardya para desenmascarar una misteriosa secta que adora a Avalon, mientras que Mila y Gavril tendrán que preocuparse por proteger al rey contra los atentados que han estado ocurriendo y van en aumento.
Sin embargo, hay algo que todos están pasando por alto y tal vez ahí esté la respuesta que cada uno desea encontrar.
Antes de nada tengo que decir que este libro lo encontré de casualidad en formato audiolibro, un formato al que no estoy acostumbrada pero que he descubierto que me va de maravilla para esos días que tengo mucho lío por casa y quiero zambullirme en una nueva historia. Además, aunque la primera parte de esta trilogía (que aún está en proceso de escritura) me gustó sin entusiasmarme, habían demasiadas incógnitas en mi cabeza que necesitaba responder, así que cuando encontré el libro no pude evitar darle al play. Aquí eso no se puede hacer, sin embargo creo que ya es hora de dejarnos de tantos preámbulos y empezar a hablar de lo que interesa: el libro.
Como en la vez anterior, nos encontramos con un nuevo misterio, una nueva desaparición: la del Sol. Espera... ¿cómo que el Sol? Pues eso, desde el final de la primera parte de la trilogía ha pasado un año. Un año desde la muerte de Elyon. Y desde entonces Emil y Gianna se han casado, han empezado a hacer un tour por el reino, han sido víctimas de varios intentos de asesinato y el Sol ha empezado a comportarse de lo más extraño. Sale tarde, poco o directamente no aparece en el cielo y nadie sabe por qué. Bueno, nadie, lo que se dice nadie... mientras los rebeldes atacan a Emil acusándolo de ser el falso rey de la nación del Sol, en el reino de la Luna el culto de Avalon va ganando fuerza, pues esperan la llegada de la luna roja. La luna que traerá de vuelta a Avalon y hará desaparecer el Sol. Y bueno, podríamos decir que sus planes se cumplen (más o menos).
Por otro lado, Zelos ha dejado de ser uno de los personajes que más manía me han dado, pues entre la madre de Gia, el oráculo y la reina Lyra están en el top 3. Bueno, a ver, esto lo tengo que aclarar porque la que más manía me ha dado ha sido la madre de Gianna por lo controladora y manipuladora que es, pero en eso Gia también tiene parte de culpa, quiero decir... es la reina, es mayor de edad y es incapaz de mandar a su madre a... No entiendo por qué esa mujer debe controlar tanto su vida íntima y privada como la pública, si ya tiene mil asesores y amigos que la ayudan. Que pesadilla... Y luego están las Ilardyanas... ¿Me ha dado rabia que secuestraran, "torturaran" y manipulasen a Elyon? Sí. Mucha. Pero... mientras que el oráculo se me ha hecho muuuy pesada, puedo medio entender lo que mueve a Lyra. Sin embargo, no acabo de entender cómo, después de dejar atrás a esa familia que no te quiere, puedes decidir unirte a una secta que lo primero que te pide es que mates aquello que más amas, para luego de automutilarte para proteger a tu mentora ella decida que, como tú eres lo que más ama, debe matarte. Yo creo que hubiese salido por patas como ha hecho Elyon.
Dejando todo eso de lado y como ya he mencionado, en esta segunda parte las preguntas que me planteé en el primero se responden. Preguntas que si leísteis la reseña de El Príncipe del Sol, sabréis que están relacionados con temas que me desilusionaron bastante (más que nada porque creo que solo llegué a conectar con Elyon): ¿Cuál es el origen de los poderes de Elyon? ¿Hay más cómo ella? ¿Qué la conecta con Avalon? La verdad es que me alegro de que el final del primer libro solo hubiese sido una visión, una ilusión de la Reina de la Luna y Elyon siga con sus amigos, aunque teniendo en cuenta todo lo que ha pasado desde que ella "murió" ante sus ojos... me sabe mal que vuelva a su anterior vida y descubra que Emil y Gianna se han casado (y espero que en el siguiente libro se pueda arreglar eso).
En definitiva, el libro en general me ha gustado. De hecho me ha gustado más que el anterior y me ha dejado con más ganas para continuar con la trilogía (más ganas que con el primero digo). El problema es que, a diferencia de El príncipe del Sol, con este he tenido un poco la sensación de que la historia se iba desarrollando a trompicones. Me explico: no sé si ha sido por el hecho de escucharlo en vez de leerlo o qué pero he notado como que las partes de acción se concentraban en unos pocos capítulos separados por varios que aportaban información, de modo que he sentido algo así: no pasa gran cosa, pasa algo emocionante de sopetón, no pasa gran cosa, vuelve a pasar algo emocionante, otra vez sin pasar gran cosa... Pero bueno, quizá solo es mi percepción, ya os digo que el libro me ha gustado bastante y toda la trama de Avalon me ha parecido genial (aunque tengo que decir que la relación Ezra-Bastian ha sido de lo que más me ha tenido enganchada, la verdad).
VALORACIÓN: ⭐⭐⭐
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