La Reina del Sol lleva un tiempo desaparecida. Tiempo suficiente para que el país del Sol empiece a pensar en substituirla. Emil, el Príncipe heredero, solo quiere recuperar a su madre, pero la búsqueda de la Reina deberá esperar, pues El Proceso ha empezado: tiene que elegir a una de sus tres mejores amigas para casarse con ella y convertirla en Reina.
Las tres candidatas participan en El Proceso para ayudar a su amigo y darle apoyo. Pero poco a poco se irán adentrando en la misteriosa desaparición de la Reina y dejarán de lado la competición por ser reinas. Todos piensan que los habitantes del reino de la Luna se la han llevado, pero no tienen pruebas y tampoco la encuentran allí (además, raptar a la Reina del Sol implicaría declarar una guerra y tampoco han intentado atacarles). ¿Puede una persona simplemente desaparecer sin dejar rastro?
Tengo que decir que me ha costado bastante meterme en la historia y que en varias ocasiones esperaba más de algunas situaciones y/o personajes. Sin ir más lejos, El príncipe del Sol debería centrarse en Emil, ya que es, de hecho, el príncipe del reino del Sol. Sin embargo, tengo la sensación de haber conocido más a Elyon. Emil se ha dejado llevar prácticamente todo el rato por su tío (con todo el tema de ser rey) o por sus amigos (con todo el tema de la desaparición de su madre), y cuando por fin parece que empieza a imponerse y a tomar decisiones... bueno, acaba dejándose llevar otra vez.
Los personajes tampoco me han llamado mucho la atención. También es verdad que durante la mayor parte del libro he estado confundiendo a Emil y a Elyon (sobre todo porque a la última la llaman por el apellido en bastantes ocasiones). Pese a todo, me parece que tampoco se profundiza mucho en sus historias. Me explico: de Gianna y Gavril se sabe que son hermanos, que los padres están separados y que la madre infunde miedo a todo el grupo de amigos (pero no se sabe por qué). De Mila no se me ha quedado nada, salvo la relación con la marinera lunar (¿Rhea? Se me dan muy mal los nombres). Y luego están Emil y Elyon, que tienen unos secretos que te ayudan a comprender mejor cómo son y sus miedos. La relación de Ezra y Bastian creo que va a tener más protagonismo en el segundo libro (y eso es algo que espero con muchas ganas, pues pensaba que saldrían más en este primer libro y no ha sido así).
En el caso de los adultos tengo que decir que las escenas donde aparecía Zelos me ponían muy nerviosa. Básicamente es un personaje que se pasa el libro ninguneando a su sobrino quién, por cierto, es el futuro rey (no sé, un poco de consideración le podía tener). De hecho, le mete prisa para que se case y se convierta en rey pero cuando quiere aportar algo lo menosprecia e ignora. No sé, es un personaje que me daba mala espina, incluso llegué a pensar que él estaba detrás del secuestro de su hermana. Lo que me lleva a la Reina. Después de más de medio libro pensando que la habían raptado... luego se descubre que no fue del todo así. Bueno, se descubre es un poco decir mucho. Se insinúa que su llegada a la Isla fue voluntaria pero se la encuentran en un estado bastante malo y no se profundiza en el por qué de todo eso.
Pese a todo, el libro me ha gustado. Si no le he puesto 3 estrellas es porque no me ha enganchado del todo hasta la tercera parte de la historia. Además no he llegado a conectar con prácticamente ningún personaje y me ha desilusionado bastante que no se trataran algunos temas que, creo, son interesantes: la relación entre Elyon y Avalon, el origen de los poderes de Elyon (y si hay más como ella) y la verdadera historia de la desaparición de la Reina. El final me ha sorprendido bastante (y no para bien), pues pensaba que tardarían un poco más en volver a hacer vida normal. No sé cuándo leeré el segundo libro pero tengo claro que quiero continuar la historia para ver cómo acaba.
VALORACIÓN: ⭐⭐
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