- Reseña - Winter (Marisa Meyer)


Winter siempre ha vivido atemorizada por Levana, su madrastra. La misma que le obligó a cortarse la cara para que su belleza no le hiciese sombra. Pero siempre ha tenido a Jacin a su lado, al menos hasta que desapareció antes de la boda de Levana y Kai. Ahora está sola y nadie puede pararle las alucinaciones, ni siquiera Scarlet, la terrestre que consiguió salvar de Levana y que ahora está en el zoológico real. Sin embargo, la cosa vuelve a cambiar con la llegada de Jacin y su juicio por traición.
Mientras tanto, Cinder y la tripulación de la Rampion empiezan a organizarse para llevar a cabo su plan y derrocar a Levana de una vez por todas. Pero Levana no es tan ingenua y decide registrar las naves que llegan a Luna, cosa que provoca que el equipo se separe dejando a Cress atrás. Y ese solo es el principio de sus problemas, pues las revueltas que provocan encienden la ira de Levana y ambos bandos empiezan a cometer errores. 
¿Podrán conseguir derrocar a Levana y vivir para contarlo?

No creo que Winter hubiese podido acabar de otro modo. Aun así, me ha decepcionado en ciertos momentos. Me explico: en el libro anterior Cinder pudo meterse en la cabeza de Sybil, lo que me hizo pensar que, si la provocaban, desataría un poder enorme que podría hacer frente a su tía, a Levana. Sin embargo, todos los meses de entrenamiento y ese amago de poder se quedan en nada (y mira que hay momentos en los que podría haber explotado... pero NO. Cinder no utiliza su poder prácticamente en ningún momento). De hecho, sin la ayuda de Winter, Cress y Scarlet su rebelión no hubiese quedado en nada, pues ella solo era la cara, lo que los demás querían pero... realmente, Winter es la que consiguió a los soldados mutantes, Scarlet la que los guió y Cress la que consiguió transmitir el mensaje por toda Luna.

La historia de Winter me ha flipado. Que Levana le obligase a cortarse la cara me ha impactado mucho porque, después de todo, no le ha servido de nada. Además, que no quiera usar su don, aunque sea para hacer buenas acciones, me parece genial (teniendo en cuenta que las buenas acciones dependen del punto de vista, cosa que ha dejado clara con la historia de la criada). Sin embargo, si de vez en cuando, estando sola en su habitación, utilizara el don para, por ejemplo, cambiarse el color del pelo... no dejaría de usar su don, no tendría alucinaciones, y tampoco manipularía a nadie (problema resuelto). Pero bueno... por lo menos tiene a Jacin al lado, y aunque se muestre un poco reacio a tener una relación con ella (pese a que se muere de ganas), los dos son adorables. En ese sentido, me ha gustado mucho que el papel de Jacin fuese, teniendo en cuenta el cuento de Blancanieves, el del príncipe y el del cazador (aunque pobre Ryu).

Por otro lado, la relación de Cress y Thorne creo que es mi favorita. Aun así, tengo que decir que la reacción de Thorne ante la idea de dejar atrás a Cress ha sido bastante parecida a la de Wolf con Scarlet. Pero no sé, Cress me parece adorable y Thorne también, aunque quiera dar una sensación de chico malo. Sin embargo... hay momentos y momentos. Vale, en el libro anterior se besan en la azotea en medio de la batalla, pero es que aquí lo vuelven a repetir y un poco más y la misión se va al traste. Y encima, después de declararse mutuamente, ¡Levana les obliga a apuñalarse! (madre mía que mal lo pase cuando Thorne no puede ayudar a Crees, pensaba que ella se moriría en su cara). Lo que me lleva a Levana.

El papel de Levana durante toda la saga me ha gustado mucho. La he odiado y casi he entendido su sufrimiento cuando se nos cuenta su pasado con la madre de Cinder (hasta que recuerdas que quiso que una niña de 3 años pasara por el mismo infierno que ella, provocando que la quemaran viva). Por eso Levana no solo es la villana, sino que me ha parecido una villana genial porque las modificaciones extras de Wolf no se las merecía, igual que Thorne no se merecía tener que apuñalar a Cress. Además, la batalla final entre Levana y Cinder es brutal (que agonía leyendo esa parte). El enfrentamiento que tienen ambas, cada cual más exhausta, hasta que Levana tan rastrera como siempre, apuñala en el corazón a Cinder y esta le dispara me tuvo con el corazón en un puño. Juro que pensé que Cinder no lo contaba y que, encima, seguro que había fallado el disparo (luego me acordé que habían mencionado que la mitad del corazón de Cinder era falso).

En fin, después de todo lo que han pasado... Me alegra que las cosas acaben como lo han hecho. Cinder, Kai, Iko, Thorne, Cress, Scarlet, Wolf, Winter y Jacin se merecían poder respirar por fin. Aunque ahora Cinder tenga que aprender a vivir sola, después de todos estos meses rodeada de gente que la quiere... me alegra que se queden con la Rampion y que Cinder quiera convertir Luna en República para que no se repita la historia de Levana. Lo que me hace gracia es que no quiere ser reina de Luna... pero emperatriz junto a Kai no le importaría (muy normal todo).
 
VALORACIÓN: ⭐⭐⭐⭐

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