El peligro aumenta para los Cazadores de Sombras ahora que esta trilogía, besteller del New York Times, llega a su fin. Si la única manera de salvar el mundo fuera destruyendo a quien más amás, ¿lo harías? El tiempo corre. Debes elegir. Pasión. Poder. Secretos. Magia. El peligro acecha a los Cazadores de Sombras en la entrega final de Los Orígenes.
Llegamos al final de esta trilogía que me ha enamorado y que, sin duda, va a quedarse por mucho tiempo en mi top 5 (sobre todo por este último libro que cierra tan bien todo lo que pasa). De hecho, suceden tantas cosas que no sé por dónde empezar ni que decir para no hacer una entrada demasiado larga, porque de verdad... MADRE MIA. Así que dividiré lo que voy a decir en tres partes: las batallas, los personajes y mi trío favorito.
Princesa mecánica es, de los tres, el que me ha dado una sensación más bélica. De hecho empezamos con una batalla en casa de los Lightwoods después de que Benedict se convierta en un gusano demoníaco (eso no me lo esperaba). Pero es que, además, los shadowhunters se enfrentan varias veces a los autómatas y estos cada vez están mejor desarrollados gracias a Mortmain (y un poco a Tessa). No solo luchan en el Instituto, otra vez, sino que Will se enfrenta a ellos en un pueblo perdido en medio de la montaña y, luego, todos se enfrentan a ellos en la cueva donde Mortmain retiene a Tessa. Sin embargo, después de todo lo que han vivido para llegar a eso, y después de que casi acaben todos muertos, Henry saca uno de sus inventos que neutraliza a los autómatas en un segundo, cosa que me parece un final un poco rápido para ser la gran batalla. Pero bueno, no importa porque lo que hace Tessa con Ithuriel es BRUTAL. Y no, no voy a hacer más comentarios porque pienso que es algo que, si no habéis leído, deberíais leer.
Respecto a los personajes... Es algo bastante extenso. El Cónsul me ha sorprendido bastante con su comportamiento hacia Charlotte, quien, se supone, es su amiga... No entiendo porque, de la noche a la mañana, se vuelve tan despreciable (si es que normal que acabe cómo acaba) y lo único que me entra en la cabeza es que sea así para que podamos conocer mejor a Gideon y Gabriel y que estos se conviertan en unas mejores personas. Porque de verdad que AMO las parejas que se forman en el Instituto. Gideon y Sophie son monísimos y me alegro muchísimo de que ella acabe siendo una más del equipo, aunque no podamos verla en acción. Por su parte, Gabriel y Cecily también son adorables, aunque tardan bastante en acercarse, la verdad es que me encanta como se maneja ella con él y con su hermano (cualquiera le dice nada). Y eso me lleva a Charlotte y Henry que no solo tienen que tomar decisiones difíciles, sino que me hace mucha ilusión que ella se convierta en cónsul y que él sea el responsable de inventar el portal (con ayuda de Magnus, en serio este brujo se merece el cielo😍). También tengo que decir que me hacía mucha gracia que todos se quejaran de las canciones de la cocinera, pero en realidad me hacía aún más gracia que sus letras estuviesen relacionadas, más o menos, con lo que estaba sucediendo en ese momento. En serio BUENÍSIMO. (Me he sentido como Shopie en el momento de su pedida, con esa canción yo también iba a la cocina para matarla).
Y llegamos al final... Will, Jem y Tess. Tres personajes que me han ido ganando a lo largo de la trilogía y que se van a quedar en mi corazón por mucho, mucho tiempo. El amor que se tienen estos tres es algo de otro mundo y me encanta. En el libro anterior, cuando Will se entera del compromiso de Jem y Tessa, se me partió el corazón junto con el de Will y Tessa. Pero cuando Jem se va y Will pierde su conexión parabatai es cuando realmente una parte de mí se fue con Jem y sentí el dolor de Will por perder a su amigo, a su hermano, a su mitad. Y cuando en la cueva se descubre que Jem sigue ahí... Juro que tuve que leer ese cacho dos veces porque no me lo creía. Los tres volvían a estar juntos aunque luego tuviesen que despedirse (madre mía qué llorera). Jem, Will y Tessa se merecían estar juntos. Los tres. Y no me parece bien que Jem no pueda formar parte de su vida, aunque eso signifique que Will y Tessa puedan estar juntos. De verdad, me encanta que puedan estar juntos porque me encantan como pareja, pero preferiría al trío junto que no solo a dos de ellos.
Pese a todo, es un libro que me ha encantado. Han pasado tantas cosas que me he dejado muchas, seguro. Pero no importa, porque creo que lo más importante ya lo he dejado claro. Los habitantes del Instituto de Londres me han hecho reír, llorar y sentir lo que ellos sentían a un nivel que no es normal. He leído otros libros de cazadores de sombras de los que os hablaré en algún momento, pero creo que esta trilogía, que Will, Jem y Tess, van a ser mi saga favorita de entre las sagas que hay de cazadores de sombras.
VALORACIÓN: ⭐⭐⭐⭐⭐
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